El concepto de novela histórica es un poco contradictorio en sí mismo. Si es una novela, es que está inventada. Si es historia, es que es real.
Se conoce con este término a las novelas que transcurren en una época histórica determinada y normalmente alrededor de algún personaje histórico, aunque la historia en sí misma, o el transcurso de esta, sea una invención.
Hay quien trata a los autores de este tipo de novelas como historiadores. Los historiadores por supuesto no están de acuerdo con esto.
Lo curioso es que la mayoría de los autores de estas novelas tampoco quieren considerarse nada parecido a historiadores. Estos autores son conscientes de que se han permitido licencias literarias no históricas para poder contar lo que querían de la forma que querían.
La documentación previa y necesaria para escribir una novela de este tipo es muy intensa. Esto hace que el autor se permita licencias fruto de su imaginación y simplemente para darle una coherencia a la historia que quiere contar.
En ocasiones esos errores de época son conscientes y en otras no. Eso no importa, porque se trata de una novela, no de una recreación histórica.
Cuando leemos una de estas llamadas «novela histórica» debemos ser cautelosos con la parte de la Historia.
Si queremos escribir una novela histórica, entonces debemos documentarnos todo lo posible a partir de libros y contenido documental de Historia, no a partir de otras novelas históricas.
Yo sinceramente evito esta dificultad inventándome un futuro. Ahí nadie te puede decir que lo has imaginado mal.
Que via la ciencia ficción y la fantasía.
Hasta pronto.
Ignacio de Miguel
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