No te sorprenda que junte la televisión, la radio y los pódcast.
Obviamente son medios diferentes, pero tienen en común la forma de hacer los guiones, el tipo de información que tienen los guiones.
El motivo es que en definitiva se trata de hablar durante un tiempo, solo o acompañado, y de dar entrada a secciones o temas.
Y hay que hacerlo todo seguido.
Un pódcast o un vídeo de youtube (¿hay diferencia?, guiño, guiño, ya hablaré de eso otro día) grabado lo puedes editar, pero salvo esa opción de repetir lo que “ha salido mal”, no hay más diferencia.
Además cada vez está más de moda grabar en directo los pódcast, videopódcast o como lo queramos llamar.
Así que en cuanto a la preparación y elaboración de un guion se refiere hay poca diferencia entre un guion de televisión, radio, youtube o pódcast.
Enséñame un guion
No puedo, o mejor dicho, no debo. No es por cuestiones de protección de derechos ni nada parecido.
No puedo enseñarte un guion porque en realidad cada guion tiene sus peculiaridades según quien dirija el programa y quién lo ejecute.
Pero sí voy a indicar algunos de los elementos comunes de este tipo de guiones.
Contienen indicaciones para el locutor, aunque el locutor sea uno mismo. Si se ha de decir una frase o unas palabras en particular aparecerán escritas pero además una indicación de que deben ser leídas tal cual.
Esto tiene sentido cuando se mencionan siglas de instituciones o se hace promoción de un producto o cuando se hacer referencia a una descripción o palabras de terceros.
Cuando escribimos el guion sabemos que esa frase ha de ser dicha tal cual, pero además lo adecuado es añadir una nota para indicarlo, para que no se nos olvide como si el guion fuera para un locutor diferente a nosotros (que puede ser el caso también).
El guion suele incorporar los elementos de diseño sonoro que se incorporarán en tiempo real o en después en postproducción (si se trata de un vídeo o pódcast grabado).
En la mayoría de los casos los guiones no incluyen los textos completos sino una escaleta de lo que va a ir sucediendo.
Algunos podcasters sí que escriben todo el texto que después leerán con mayor o menor acierto. Los que hacen esto en la mayoría de los casos se nota que están leyendo y desluce un poco el contenido.
Lo más habitual es tener una escaleta ordenada de temas y los epígrafes más importantes de la información que se quiere contar.
De lo que puedes estar seguro es que un buen contenido tiene un guion. Hasta cuando se improvisa hay un guion para saber qué es lo que se tienen que improvisar.
Los guiones se llevan la parte más extensa del trabajo de un programa. Grabar es rápido. Editar y montar suele ser poco tiempo (muchos no editan nada salvo introducciones y salidas).
El guion del buen comunicador no te lo quita nadie.
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Hasta pronto.
Ignacio de Miguel
Agencia Pódcast.