Aclaro por si acaso que este correo no es el mismo que el titulado «Los tipos de series».
Porque no es lo mismo. Mucho cuidado con el lenguaje. Dicen que si cometo faltas de ortografía venderé más por correo electrónico.
Pues que sepas que si ves una falta de ortografía es que se me ha pasado, porque yo no soy de esos. Lo siento pero no. El lenguaje es muy importante, y no se debe abusar de él solo por vender más.
Además ahora mismo no te quiero vender nada. Bueno sí, quiero que envíes este correo a todo el que se te ocurra para que se apunten a esta lista de TRANSFICCIÓN.
Te cuento una novedad por si no la has visto
Ahora ya no existe Basicast, ahora el directorio de ficción sonora es Transficcion.com ¿Por qué? Porque el nombre mola más. Y ya está, espero que te guste más.
A lo que venía hoy, a los tipos de las series.
Cada vez hay más mujeres. Bueno, y siguen siendo los tipos, o las tipas de las series. ¿Crees que empatizamos más con una mujer protagonista que con un hombre?
¿Funcionarían igual las series que tienen una mujer como protagonista si lo cambias por un hombre o viceversa?
Hay series en que se fuerza el género del protagonista. Pero en realidad da igual. Al final tienes que meter personajes de los dos tipos.
Porque recordemos que la realidad es variada, y las historias son un reflejo y una derivada de la realidad. La ficción es realidad y la realidad es ficción, ya lo he contado alguna vez (si te interesa dímelo y lo vuelvo a contar).
Salvo que la argumentación lo requiera, no tiene sentido que sean todo mujeres ni todo hombres. Eso nos gusta menos, nos atrae menos, nos lo creemos menos.
En la variedad está el gusto. En las series también, y en los personajes de ficción también.
Mi primer personaje
Y ahora te cuento que mi primer personaje es una mujer. ¿Por qué? Porque pegaba más. O no. La verdad es que no lo sé. Tal vez lo hice por moda.
Creo que mi historia funcionaría igual con un hombre que con una mujer. Eso sí, tendría que cambiar el género de los coprotagonistas y otros personajes para que la historia tuviera todo el sentido.
Al final da igual. Nos gustan los héroes. Pero no podemos vivir sin heroínas. Y al revés.
Mi segundo personaje
Pues mira, este es un hombre. Me refiero al personaje principal de mi segunda historia.
Acompañado de una mujer, pero el protagonista es un hombre. Espero que una productora a la que le guste la historia no me haga cambiarlo.
Aunque en realidad me da igual porque ni siquiera he decidido el nombre. Venga, me voy a decidir un nombre. En el próximo correo a ver si ya lo tengo y te lo cuento.
Por lo menos te contaré cómo los escritores ponen nombre a sus protagonistas.
Te espero.
Ignacio de Miguel